Si estás buscando un reflector fotocelula, ya sabés que es un sensor óptico que combina un emisor y un receptor para detectar obstáculos o interrupciones del haz de luz. Es ideal para portones, cortinas automáticas, iluminación con detección y sistemas de seguridad.
Qué es y para qué sirve- Un reflector fotocelula envía un haz y mide si llega correctamente al receptor. Cuando se interrumpe o se desvía, vos activás la acción deseada.
- Se usa para abrir o cerrar portones y puertas automáticas, activar iluminación al pasar o frenar máquinas por seguridad.
- Permite detección sin contacto, lo que minimiza desgaste de componentes mecánicos.
- Alcance: fijate qué distancia precisa para tu instalación (p. ej., 2 a 12 metros).
- Tipo de salida: relé o transistor para integrarlo a tu controlador.
- Alimentación: 12–24 V, AC o DC según tu sistema.
- Protección: busca IP65 o IP67 si va a polvo y humedad.
- Tipo de emisión: IR cercano; asegurate de compatibilidad con tu control.
- Montá el emisor y receptor alineados a la misma línea de haz; la inclinación cero evita falsas alarmas.
- Ajustá la sensibilidad o distancia de detección según el uso; un rango razonable mejora la fiabilidad.
- Conectá a la central adecuada y probá el ciclo de apertura/cierre con objetos de prueba.
- Protegé los cables y dejá un margen de seguridad para el tendido.
- Mantén el lente limpio de polvo, suciedad o grasa para no perder rendimiento.
- Evita interferencias de otras luces o haces de láser cercanos.
- Realizá pruebas periódicas; si notás fallas, revisá alineación y voltaje.
En resumen, un reflector fotocelula bien elegido y correctamente instalado mejora la seguridad, la comodidad y la eficiencia de tus sistemas automáticos.