¿Vas a arreglar o embellecer un cerco sin complicaciones? un cubre cerco es la solución práctica para ocultar, proteger y darle un toque más moderno a tu cerca. Se instala fácilmente sobre el cerco existente y puede mejorar la privacidad, reducir el desgaste y aportar color o textura sin necesidad de una obra grande.

Es una funda, panel o cobertura diseñado para colocarse sobre el cerco. Su objetivo es cubrir el material base, aportar un acabado más limpio y, según el material, brindar protección contra el sol, la lluvia y el polvo. Es ideal tanto para cercos de jardín como para perímetros de vivienda o pequeños proyectos de obra.

• Mejora estética: colores y texturas que combinan con el estilo de tu casa o jardín.
• Privacidad extra: el cubre cerco puede evitar la visibilidad desde la calle o desde vecinos.
• Protección del cerco: reduce el desgaste por sol, viento y humedad.
• Instalación rápida: se instala sin necesidad de obras pesadas y se puede quitar y volver a usar.

• Plásticos resistentes (PVC, polietileno) y textiles sturdos como poliéster o tela Oxford para mayor durabilidad.
• Resistencia UV para evitar que se decolore con el tiempo.
• Variedad de colores y acabados (verde, gris, negro, texturas imitadas, etc.) para combinar con el entorno.

• Medí las dimensiones: longitud total del cerco y la altura deseada. Anotá medidas en centímetros para comprar el tamaño correcto.
• Tipo de fijación: bridas, ganchos, cuerdas elásticas o velcro. Elegí el que resulte más cómodo y seguro para tu cerco.
• Clima y ambiente: si hay mucha exposición solar o lluvias, optá por materiales con mejor resistencia a la intemperie.
• Color y estilo: buscá un cubre cerco que armonice con la fachada, macetas y el jardín.

1. Reuní el cubre cerco y las fijaciones adecuadas.
2. Medí y, si hace falta, cortá el material siguiendo las medidas exactas.
3. Fijá la pieza superior primero y luego distribuí la tensión a lo largo del cerco con ganchos o bridas.
4. Comprobá que quede bien ajustado y sin holguras.

• Enjuagá con agua y jabón suave para eliminar polvo y suciedad.
• Dejá secar al aire, fuera de la exposición solar directa prolongada para conservar los colores.
• Evita limpiadores agresivos o blanqueadores que pueden dañar el material.
• Si necesitás guardarlo por temporada, doblalo con cuidado y almacenalo en un lugar seco.

• ¿Se adapta a distintos grosores de cerco? En general, la mayoría de cubre cercos son dimensionables o vienen en talles estandarizados; verificá las medidas y opciones de ajuste antes de comprar.
• ¿Se puede quitar y volver a usar? Sí, la mayoría se instala con fijaciones que permiten retirarlas y reutilizarlas en otros proyectos.
• ¿Es lavable? La mayoría resiste limpieza con agua y jabón, aunque conviene evitar lavados a alta presión que puedan deformar el material.